Varios hombres sin vida va dejando atrás, en un carnaval de sangre y desolación, arrastra los pies, el sudor cae por su cuerpo, resbala en su blanca piel y se mezcla con la sangre que cae de sus heridas, su cansancio no le permite subir su frente cubierta por sus largos cabellos negros, le cuesta trabajo respirar, de sus vacíos ojos caen lágrimas, y su boca resalta entre el gris del cielo con labial carmesí corrido y con una expresión de odio, como una muñeca vieja, su vestido está lleno de manchas y rotos, Su alma casi cómo su pasado le persigue, le acecha, sin rumbo alguno camina cojeando, se detiene un momento y mira al cielo, es la primera vez desde hace años que ve la luz del día, esboza una sonrisa diabólica, finalmente, había logrado escapar de su infierno. El nunca mas seria lastimado.
Es difícil empezar la vida de cero, pero es mi única opción, es mi único recurso, era eso o seguir confinado en aquel lugar, que envenena mi mente de tan solo recordarlo, no planeo olvidar lo que me ha sucedido, seguir como si nada y sonreír, solo planeo, enfrentarme al amargo destino.
La escuela esta llena de gente sonriente o simplemente, con preocupaciones tontas, no me interesa verlos a la cara, no me interesa siquiera compartir con ellos, ha sido difícil aceptar el hecho de ser libre, y de no tener que huir, de no tener que cerrar los ojos ante el dolor de lo que presenciaba, de lo que sentía, me habían separado de mi hermano, yo prometí que escaparía y que lo vería algún día, a los dos meses de escapar, lo encontré, estaba en el mismo orfanato que yo, no dude en reconocerlo y el no dudo en saber que era yo, lo daría todo por el, todo si fuera necesario, nos adopto a ambos una mujer que quería tener gemelos, tal vez esa experiencia enfrió mi corazón, pero para mi, el resto de personas, excepto mi hermano, no merecían nada en la vida, me parecían simplemente inútiles, débiles, insignificantes, ya han pasado dos años, desde mi segundo nacimiento, desde que dejamos de ser William y Thomas, y nos convertimos en Alex y Luke
miércoles, 28 de septiembre de 2011
lunes, 12 de septiembre de 2011
Worthless
Preguntarte si sientes el ardor que yo siento seria inutil, inutil en tantos sentidos, inutil porque no lo haria, no puedo hablarte, no puedo pronuncir palabra, no puedo decir mas que lo obvio pero en el interior se guardan en mi miles de palabras, una muñeca rota, rota y abandonada, desaba ser tu muñeca a la cual adorabas cada tarde y ponias en tu regazo en las noches de lluvia, en relidad no soy nada, nada para ti, nunca lo fui, una muñeca ilusa que lo dio todo, y aun a pesar del tiempo sigue rogando por tu cariño ese que das a otras, ese que nunca recibi, talvez no estes hecho para mi, tal vez no este hecha para ti, mientras tanto sere una muñeca solitaria vagando en busca de un amor perdido, en busca de olvidarte, de dejar el recuerdo de tus labios en los mios en el camino y seguir en busca de otros labios, que sean adictos al nectar de los mios.
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